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La democracia está muy sobrevalorada


Cuando era pequeño me daba cuenta que lo importante para sobrevivir, en las relaciones sociales, era asociarse y crear pandilla para protegerte. Recuerdo que te escudabas en la pandilla cuando había que hacer alguna chiquillada y uno vociferaba: "a votaciones", "¿quién quiere que Pepito salga elegido? que levante la mano", eso sí, siempre se pensaba en el más débil. Sucedía también en ese juego infantil que para medir la valía o inteligencia se recurría a las votaciones, "el que piense que Faustino es el más tonto que levante la mano" recuento de votos y quedaba instituido como el más tonto.
Ante todo, quiero deciros que yo soy demócrata, y creo que es un sistema que puede ayudar a gobernar, pero no creo que se pueda canonizar tanto como piensan muchos. La democracia es un sistema político y en cuanto sistema es un medio no una solución ni una panacea. Lo que hace que una democracia funcione son los buenos políticos y los buenos ciudadanos. Un político que no sirve, no sirve para nada (frase que nació para hablar de la Iglesia, valiéndose de la polisemia del verbo servir)
Me pone del hígado cuando muchos políticos, y aquí generalizo, hablan como si yo lo aprobara, "es lo que quieren todos los españoles", "la mayoría de los españoles están de acuerdo", "lo hacemos porque así lo reclaman los españoles" o el nuevo insulto "no eres democrátoco"... pues creo que todo español que hemos sido metidos en ese saco no hemos estado de acuerdo alguna vez en alguna decisión. Muchas decisiones no se transforman automáticamente en normas morales o irrefutables. No quiero recurrir al típico tópico de que Hitler llegó al poder democráticamente, pero puede dar a entender algo.
Es según definición etimológica el gobierno del pueblo, aunque la única decisión que tome es cada cuatro años.
La democracia tiene la ventaja de ser un sistema en el que la ciudadanía puede quitar de sus puestos a los gobernantes sin tener que cambiar toda la base legal del gobierno. En este sentido la democracia reduce la inestabilidad política y asegura a los ciudadanos que por mucho que disientan de las políticas del gobierno en un momento dado, siempre tendrán una oportunidad regular de cambiar a quienes gobiernan, o incluso de cambiar directamente las políticas con las cuales no están de acuerdo. Otra ventaja, y la más grande creo, nunca se ha establecido una guerra entre dos estados democráticos.

Concluyendo: 
  1. Si fueramos ángeles no necesitaríamos ningún sistema de gobierno.
  2. Si nosotros no fueramos ángeles y los políticos sí, no necesitaríamos democracía.
  3. Como los ciudadanos no somos ángeles ni los políticos tampoco necesitamos democracia que puede ser la mejor forma para gobernar.
  4. La democracia puede ser la mejor forma de gobernar, pero eso no quiere decir que la tengamos que llamar Santa Democracia. También tiene errores y sería bueno que le demos su valor en su justa medida.







La democracia es el peor sistema de gobierno diseñado por el hombre. Con excepción de todos los demás.    Winston Churchill 


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All is vanity


Esta ilusión óptica, pertenece a Charles Allan Gilbert, ilustrador americano de principios del siglo XX y nos presenta dos visiones distintas, la que ve la dama y lo que observamos nosotros fuera de la escena.
Pero, el motivo de este post, la verdad que no es la imagen, de hecho la acabo de descubrir, sino más bien el texto que pongo a continuación y que me ha dado vueltas todo el día.
"Vanidad de vanidades", dijo el Predicador; "vanidad de vanidades, todo es vanidad."¿Qué provecho tiene el hombre de todo su duro trabajo con que se afana debajo del sol? Generación va, y generación viene; pero la tierra siempre permanece.  El sol sale, y el sol se pone. Vuelve a su lugar y de allí sale de nuevo.  El viento sopla hacia el sur y gira hacia el norte; va girando de continuo, y de nuevo vuelve el viento a sus giros.  Todos los ríos van al mar, pero el mar no se llena. Al lugar adonde los ríos corren, allí vuelven a correr.  Todas las cosas son fatigosas, y nadie es capaz de explicarlas. El ojo no se harta de ver, ni el oído se sacia de oír. Lo que fue, eso será; y lo que ha sido hecho, eso se hará. Nada hay nuevo debajo del sol. ¿Hay algo de lo que se pueda decir: "Mira, esto es nuevo"? Ya sucedió en las edades que nos han precedido. No hay memoria de lo primero, ni tampoco de lo que será postrero. No habrá memoria de ello entre los que serán después.
No es un texto de Sartre ni de Camus. Es la primera lectura que tocaba en la Misa del día de hoy.
Es cierto, que de vez en cuando hay que hacer limpieza a fondo en la casas, ya que a pesar de ir limpiándola día a día, siempre quedan suciedades escondidas. Este es un texto que nos da un zarandeo a la vida y nos hace esa limpieza profunda. Lo mejor para limpiar la casa en profundidad es apartar todo y limpiar. "Vaciedad de vaciedad, todo es vaciedad" traducción que utilizan los leccionarios para proclamar este pasaje bíblico en las celebraciones.
Pues sí, vaciarse para poder llenarse. Texto muy existencial que lógicamente una persona que no tenga una visión trascendente en Dios recurrirá al "Carpe diem" y que los creyentes recurriremos al llenado de Dios.
Lo dejo sin hacer ninguna reflexión ya que el vaciado mío puede ser distinto a otro. Sólo añado ¿Qué estoy haciendo yo en la vida?


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